En motivo del congreso anual sobre la Diabetes que se organiza en
diferentes ciudades europeas, esta vez, la cita se ha producido en Barcelona, y
al igual que en las anteriores ediciones, se ha organizado una cursa con el
objetivo de congregar a la ciudadanía para hacer énfasis en la necesidad de
hacer deporte y llevar unos buenos hábitos alimentarios para reducir o evitar
la aparición de la diabetes. Para mí, ha sido una agradable sorpresa
encontrarme con esta carrera. En un circuito inigualable y con todo lujo de
detalles. Nada más llegar, me entregan el dorsal con chip integrado y una
camiseta técnica muy chula, al lado una mesa llena de botellas de agua para
antes de la carrera. Llegué demasiado pronto y me tocó esperar, pero en un
sitio como el Estadi de Montjuic, la espera se hace, al menos, entretenida.
Cada vez iba llegando más y más gente, para ser un jueves por la tarde, nos reunimos unos cuantos...
Llegó la hora de ponerme a calentar y la verdad que no iba muy fino, no sé si por el horario (después de comer), porque había estado mucho tiempo sentado esperando o por todo.
Así que comencé poco a poco por la recta de meta del estadi (el tartán está mucho más mullidito que en el resto de pistas que he estado), resguardándome del sol.
Antes de
salir, foto de grupo.
Pensaba
que no iba a haber tanto nivel, y en los primeros 600 metros del estadio lo
compruebo. Rápidamente me adelanta mucha gente, incluso fuera del estadio,
hasta que a mitad de carrera llega un punto que ya no me adelanta nadie y yo
puedo adelantar puntualmente a alguno. Al llegar al estadi, por la entrada
donde lo hacen los maratonianos, tengo la sensación que todavía faltaran unas
vueltas, pero me llevo una buena alegría cuando veo que la gente a los 200
metros ya paran, la verdad que el circuito de Montjuic es muy rompepiernas. Así
que llego fuerte aunque no puedo evitar que me quiten una posición en sprint.
Tiempo
de 19’09” en algo menos de 5km, quizás como apuntaba Jordi Martí, 200 metros
menos. En todo caso, muy bien, bajo de 4 el km.