Hoy la salida en bici ha sido más corta en km, pero con una buena intensidad de la primera parte dura. El itinerario en la ida ha sido similar al que hicimos 10 días antes, pero cambiando de rumbo a medio camino en la Creu de Rupit. A partir de aquí el terreno ha sido de bajada constante hasta llegar a las inmediaciones de Canyamars, con caudal en su riera, después de las nevadas de los pasados días. La belleza del paisaje y el poco desnivel han ayudado a relajarnos. De camino a la riera de Argentona hemos tenido que cruzar varias veces el riachuelo, mojándonos un poco, pero total...ibamos enfangados y así da gusto.
A partir de mañana volveré a los entrenos de carrera continua, esperando no notar las molestias que tenia el mes pasado e intentar hacer algo digno en el cross de Calella.